"...Él debe descubrir las cosas que interesan a la persona que quiere conquistar, y proporcionárselas. Puede traerle juguetes raros, que no suelen tener otras niñas. Le enseñe una bola pintada de muchos colores, punteada con pequeñas manchas, o incluso más rara; como también muñecas hechas de trapo, madera, cuerno de búfalo, marfil, y de cera de abejas, harina o barro...
Le enseñe dos ovejitas de madera, macho y hembra, unidos, o cabras y carneros; templos hechos de arcilla, cañas rotas o madera; jaulas de papagayos, cucos, estorninos, perdices, gallos y codornices; vasijas de agua con formas sorprendentes; amuletos, pequeños laudes, cunas para muñecas, bolsas de aseo, laca, arsénico rojo y amarillo, bermellón, de color negro y de otros colores; pop fin, ungüento de sándalo, azafrán, nuez de areca y hojas de betel, según el momento. Él le regale esto, según sus posibilidades, de forma reservada; los objetos evidentes, sin embargo, en público; y debe hacer todo tipo de esfuerzo para que la pequeña se dé cuenta de que él satisface todos sus deseos."